•6:14 PM
Zeus estaba furioso, pero decidió no utilizar el rayo para vengarse. En lugar de eso, puso en práctica una atrimaña propia contra los titanes y la humanidad. Recelaba de intentar burlar al astuto Prometeo, pero tenía la certeza de que a su hermano, al menos, se le podía engañar con facilidad, puesto que Epimeteo, el que siempre miraba atrás, no era el más inteligente de los titanes. Dios pidió a Hefesto, el dios Herrero, que diera vida a una mujer a partir de arcilla, a quien llamó Pandora (nombre que significa "colmada de todos los dones"). Zeus puso en manos de Pandora una caja de gran tamaño cerrada, y le dijo a su hijo Hermes que la llevara a Epimeteo como prometida, un regalo de los dioses.
Prometeo advirtió a su hermano que desconfiara de cualquier regalo procedente de Zeus, quien no tenía motivo alguno para mostrarse amistoso, pero Epimeteo vio lo hermosa que era Pandora y decidió casarse con ella. Hermes le había dicho que nunca abriera la caja y, durante días y semanas, ella intentó obedecer y olvidar la cuestión, pero la curiosidad por conocer su contenido iba creciendo día tras día. Pandora imaginaba que en su interior habría algo muy valioso y consideraba injusto que los dioses le regalaran algo para no poder disfrutarlo. Finalmente rompió los seguros y abrió la caja. De ella brotaron todas las enfermedades, penurias y tragedias que afectan a la humanidad. Pandora intentó cerrar la caja, pero de ella no cesaban de manar penalidades que iban expandiéndose por toda la tierra. Lo único que fue capaz de conservar dentro fue la Esperanza.
Una de las versiones del mito de Pandora intenta excusar la condcuta de los dioses. Si, de hecho, la Esperanza se encontraba en el fondo de la caja, sin duda el resto de su contenido debía de ser igualmente agradable. Según esta versión, la caja rebosaba cosas buenas, los regalos de los dioses del Olimpo, y todos ellos, a excepción de la Esperanza, ya no están a nuestro alcance por culpa de la curiosidad de una mujer insensata.
Esa historia, que narra cómo el mal llegó al mundo por la temeridad de una mujer, se hace eco del relato bíblico que explica cómo Eva sucumbió a la tentación de comer una manzana que trajo la muerte al mundo, junto con otras aflicciones. Algunos teólogos han argumentado que el mito de Pandora es un leve reflejo de la verdad bíblica. Los críticos seculares del mito suelen considerar todas las historias que culpan a las mujeres de la introducción del mal en el mundo producto de una sociedad patriarcal. Ya que los hombres ostentan el poder, ¿a quién mejor que a las mujeres culpar del mal?
Prometeo advirtió a su hermano que desconfiara de cualquier regalo procedente de Zeus, quien no tenía motivo alguno para mostrarse amistoso, pero Epimeteo vio lo hermosa que era Pandora y decidió casarse con ella. Hermes le había dicho que nunca abriera la caja y, durante días y semanas, ella intentó obedecer y olvidar la cuestión, pero la curiosidad por conocer su contenido iba creciendo día tras día. Pandora imaginaba que en su interior habría algo muy valioso y consideraba injusto que los dioses le regalaran algo para no poder disfrutarlo. Finalmente rompió los seguros y abrió la caja. De ella brotaron todas las enfermedades, penurias y tragedias que afectan a la humanidad. Pandora intentó cerrar la caja, pero de ella no cesaban de manar penalidades que iban expandiéndose por toda la tierra. Lo único que fue capaz de conservar dentro fue la Esperanza.
Una de las versiones del mito de Pandora intenta excusar la condcuta de los dioses. Si, de hecho, la Esperanza se encontraba en el fondo de la caja, sin duda el resto de su contenido debía de ser igualmente agradable. Según esta versión, la caja rebosaba cosas buenas, los regalos de los dioses del Olimpo, y todos ellos, a excepción de la Esperanza, ya no están a nuestro alcance por culpa de la curiosidad de una mujer insensata.
Esa historia, que narra cómo el mal llegó al mundo por la temeridad de una mujer, se hace eco del relato bíblico que explica cómo Eva sucumbió a la tentación de comer una manzana que trajo la muerte al mundo, junto con otras aflicciones. Algunos teólogos han argumentado que el mito de Pandora es un leve reflejo de la verdad bíblica. Los críticos seculares del mito suelen considerar todas las historias que culpan a las mujeres de la introducción del mal en el mundo producto de una sociedad patriarcal. Ya que los hombres ostentan el poder, ¿a quién mejor que a las mujeres culpar del mal?
2 comentarios:
Zeua es muy malo por darle a los hombres un regalo tan feo. Pero debemos tener en cuenta que utiliza por alguno motivo a la Pandora (una mujer) para introducir los males en el mundo.
Sí, coincide con otras creencias orientales que culpan a la mujer de traer todos los males a este mundo. Y el problema es que todo esto desencadenó en un desprecio a la mujer que duró mucho tiempo...